Los mejores calefactores para este invierno

Las noches tempranas que comienzan a las seis de la tarde. El suelo de la ciudad una mantita de hojas. Y las mañanas con un frío doloroso que solo puede combatirse con un buen abrigo y una bufanda calentita. El otoño languidece. El invierno está al caer. Y ya lo estás notando. No solo en la calle: también en casa. Al salir de la ducha. Mientras ves dos o tres episodios de Los años juntos. Cuando teletrabajas en el escritorio. Son momentos en los que agradecerías una ayudita para calentarte los pies fríos y las manos heladas. Sobre todo porque no tienes calefacción o, si la tienes, no puedes andar poniéndola todo el día. ¿La solución de las soluciones? Un buen calefactor.

El principal aporte de un calefactor a tu vida es calor inmediato y localizado. Lo puedes trasladar de un rincón a otro de tu hogar sin problema y subir unos grados la temperatura a tu alrededor sin tener que gastar dinero en calentar toda la casa. Además, te devuelve el calor corporal perdido rápidamente si sales de la cama medio congelado o vuelves de la calle hecho un muñeco de nieve. Lo enciendes y pum: te sientes bien a la de ya. Si le sumas que no requieren instalación, que son económicos y que hay una gran variedad de alternativas para que escojas la más adecuada para ti según funcionalidad y estética, la decisión de lanzarse a por uno es fácil. ¿Pero a por cuál?

Existen cuatro grandes categorías de calefactores: los calefactores a leña, los calefactores solares, los calefactores a gas y los calefactores eléctricos. Y no es que las tres primeras no ofrezcan buenas prestaciones. Lo hacen. No obstante, tanto su instalación como su mantenimiento son bastante más complejos y no suelen ser la opción más habitual para un hogar en la ciudad. Para esto lo ideal es uno eléctrico. Ah, pero no creas que solo hay un tipo de calefactor eléctrico. Por un lado, tienes los calefactores de resistencia de toda la vida. Son más baratos que otras alternativas y son ideales para calentar velozmente espacios pequeños. Quédate con esa idea.

¿Te interesa pero no sabes cuáles encajan en esta definición? Desde Mediamarkt te recomendamos opciones como la del Compact Power SO2210 de Rowenta, un calefactor con temperatura ajustable, dos velocidades y función frío para los meses calurosos. El tipo de calefactor con el que tienes justo lo que necesitas. Sin florituras. Directo. Y por un muy buen precio. El ReadyWarm 9800 de Cecotec es otra opción interesante: cuenta con tres modos de calentamiento, un área de cobertura de hasta 15 m2 y función de autoapagado en caso de sobrecalentamiento para que puedas calentarte sin preocupaciones. Y si buscas una opción aún más barata, esta otra es la tuya.

Por otro lado, están los calefactores cerámicos. Sus tres grandes bazas a favor son una distribución del calor más uniforme gracias a las placas cerámicas, una mayor eficiencia energética que te hace ahorrar a largo plazo y un enfriamiento mucho más rápido tras apagarse que a mucha gente le hace sentir aún más seguro. Y también aquí tenemos propuestas para ti. En un lado, el ReadyWarm 1500 Max Ceramic de Cecotec, con termostato regulable y totalmente silencioso. Para que no te estropee la película. En otro lado, el ReadyWarm 2050 Max Ceramic de Cecotec, con rotación, con mayor alcance y con mando a distancia. Una opción premium.

Además de estos dos tipos de calefactores eléctricos, también están los calefactores de aceite y los calefactores de radiación. Sí, estas opciones requieren una inversión inicial más elevada, pero también ofrecen un rendimiento óptimo que se termina agradeciendo muchísimo. Si deseas explorarlas un poquito tienes más de 600 modelos aquí. Como siempre, la elección entre todos estos tipos va a depender de qué busques y de qué presupuesto tengas. Sea como sea, recuerda que SIEMPRE hay un producto perfecto para ti en nuestro catálogo. Te mereces no pasar frío estas navidades. Te mereces disfrutar a gusto de estas semanas tan especiales. ¿No crees?