PS5 vs PS5 Slim: ¿cuál me compro estas navidades?

Cuando se trata de consolas lo más importante es el rendimiento. Sí, si tiene una estética linda que encaja con la decoración de tu habitación o con el flow del salón, genial, pero eso es totalmente secundario. Tú lo que necesitas es que los juegos corran bien. Y en eso no hay diferencias entre la PS5 y la PS5 slim. ¿La razón? Ambas utilizan el mismo procesador, el AMD Ryzen Zen 2, y una GPU basada en la misma arquitectura, la RDNA 2, lo que en conjunto ofrece una potencia de 10.28 TFLOPs. ¿Te suena a saturniano? Da igual. Lo que cuenta es que van de maravilla y te puedes echar partidas fluidísimas con unos gráficos excelentes.

En cuanto al almacenamiento, otro aspecto clave del rendimiento, tampoco deberías preocuparte porque tanto la PS5 original como la PS5 Slim incluyen un SSD ultrarrápido de 825 GB. Con esto tienes de sobra para que la experiencia de juego sea magnífica y para que los tiempos de carga sean mínimos. Eso sí, y aquí viene la primera diferencia entre ambas consolas, la versión Slim cuenta con un diseño interno bastante optimizado que proporciona un funcionamiento más eficiente. ¿En qué sentido? Bueno, en que la consola genera menos calor, algo que en los meses de verano se agradece, y sobre todo mucho menos ruido.

Las principales diferencias entre ambas máquinas está en el diseño. Mientras que la PS5 original presenta unas dimensiones de 390x260x104 milómetros, la PS5 Slim desciende hasta los 358x216x92. Una estética más minimalista que te permite encajarla en muchos más rincones con más facilidad. Pero no solo eso: la versión original pesa 4,5 kilogramos, mientras que la Slim pesa tan solo 3,2 kilogramos, lo que puede tener cierta utilidad a la hora de trasladarla. Hoy la dejas en el salón para jugar en cooperativo local. Mañana la pones en tu cuarto para una sesión más inmersiva con un Animal Well. Esa pseudoportabilidad da gusto.

Por otro lado, ten en cuenta que mientras que la PS5 original tiene dos subversiones, una sin lector de juegos físicos y otra con lector, la PS5 Slim tiene la ventaja de permitir la adquisición del lector aparte. Esto hace que puedas pillarte la Slim ahora con únicamente el lector digital interno de la consola y más adelante, si lo prefieres, si decides que necesitas tener físicamente ese juego que tanto te mola, te compras un lector compatible y listo. Una actualización a lo fácil. Ah, y ambas consolas disponen de puertos USB-C, USB-A, HDMI 2.1 y compatibilidad con Wi-Fi 6. Exactamente lo mismo. Ahí no hay dilemas ninguno.

Nosotros te hemos dado la información. Tú tomas la decisión. Si te gusta el clasicismo, la pureza, está claro que la PS5 original gana, y tiene un impacto visual más potente. Por lo demás, la PS5 Slim quizá te ofrezca un poquito más porque ocupa menos espacio, tiene esa modularidad alrededor de los lectores que se agradece mucho y, sobre todo, es más eficiente. Y no es solo el calor y el ruido lo que produce eso: también un ahorro de hasta el 20% en la cantidad de energía que usa. Si eres un gamer casual no importa mucho, pero si eres GAMER puede marcar una buena diferencia. En cualquier caso, una u otra, te estarás llevando a casa una máquina de alto nivel. Una máquina de felicidad.

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